La motilidad se sugirió como una “biofirma” prometedora ya en la década de 1960, pero la tecnología era insuficiente… hasta ahora.
Investigaciones recientes muestran que los microbios responden al estrés, como los altos niveles de sal, moviéndose, lo que convierte a este en un método potencial para encontrar vida en Marte. La investigación también podría ayudar a detectar patógenos mortales como el cólera en el agua, mejorando la salud pública en la Tierra.
dx.doi.org/10.3389/fspas.2024.1490090