El crucero de lujo que se convirtió en una cárcel de excrementos

En 2013, un incendio en la sala de máquinas del Carnival Triumph ocasionó que el barco, con 3.413 pasajeros y 1086 tripulantes, se quedara sin energía, a la deriva. No funcionaban los motores, ni el aire acondicionado... ni el sistema de deshechos. Los inodoros empezaron a desbordarse y los desechos humanos de los pisos superiores comenzaron a filtrarse a través de las paredes de los camarotes de la cubierta inferior. Durante una semana, los pasajeros acabaron durmiendo hacinados en las cubiertas para poder respirar, con mascarillas.

[#1 Torrezzno]

Un crucero de mierda

[#5 sotillo]

#1 Se ve que rodeado de lujo había mucha mierda tapada

[#3 Elbaronrojo]

¿Metían los excrementos en bolsas? Pues podían haber hecho como los alemanes en sus submarinos cuando navegaban en superficie.  

[#6 malditopendejo]

#3 aplaudo el ingenio humano.

[#2 Grahml]

Qué mal, leí extremeños.

[#4 pcmaster]

#2 ¿Qué tienes contra los extremeños?

[#7 soberao]

Luego te venden que unos jubilados les sale más barato estar en un crucero que vivir en su casa, como si un crucero fuera gratis y un asilo para jubilados. Desde el covid se vio que los cruceros son lo peor para contagios y un palo grande para las ciudades donde atracan tanto en términos medioambientales como en términos de saturación de las ciudades turísticas con puertos para estos barcos...

[#8 Jesulisto]

No voy a criticar a nadie que yo soy el primero que hice un crucero.
Luego, con el tiempo, te das cuenta de que el turismo interesante no es lo que se vive en resorts o cruceros sino meterse en los mercados, comer donde comen los locales y huir de los sitios llenos de Starbucks y demás.

[#10 TardisKun]

#8 El arca no cuenta como crucero, además... Diría que tampoco ibas en ella

[#9 vviccio]

-Dónde está el lujo, que yo lo vea.
-No se ve; se huele.