Puede resultar un poco peculiar comenzar una crítica de un cómic dándole las gracias a la autora, pero es la sensación que uno tiene cuando finaliza la lectura de Vanguardia es una mujer. Gracias, Clara de Frutos, por un trabajo espléndido; gracias, por dar voz a mujeres injustamente olvidadas por una sociedad en la que durante demasiado tiempo se ha pensado que la mujer era menos que el hombre; gracias, por hacerlo de una manera actual y fresca, uniendo el esfuerzo reivindicativo del pasado, el de las Sinsombrero, el de las mujeres...