El Códice Calixtino, datado en 1137, dedica varias páginas a una descripción llamativa de los habitantes de Navarra, «Un pueblo colmado de maldades, oscuro de color, de aspecto innoble, depravado, perverso, pérfido, desleal y falso, lujurioso, borracho, en toda suerte de violencias ducho, feroz, silvestre, malvado y réprobo, impío y áspero, cruel y pendenciero, falto de cualquier virtud y diestro en todos los vicios e iniquidades; parecido en maldad a los getas y sarracenos, y enemigo de nuestro pueblo galo en todo».