Lo que cuenta el doctor amor del que les hablo en las redes es que, según su punto de vista, la hipergamia se puede encontrar de un modo evidente en las aplicaciones de contactos y citas, en esa charcutería del falso amor rápido que está ahora tan de moda. Es, en realidad, una hipergamia vieja y misógina que dibuja dos clasificaciones del uno al diez en paralelo y por sexos. Los hombres disparan a todo, aunque no se atreven con el diez y el nueve y las mujeres solo disparan al ocho, al nueve y al diez.