Los niños que leen por placer son más proclives a realizar un mejor desempeño escolar que sus compañeros. Según un estudio del Institute of Education británico. Esta investigación, la primera en examinar el efecto de la lectura por placer en el desarrollo cognitivo diacrónico, encontró que los niños que leen por placer mejoran en matemáticas, vocabulario y ortografía entre los 10 y 16 años que quienes raramente leen. Este hecho fue más importante para su desarrollo que el nivel educativo de sus padres.
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