Tal vez conocéis «El Tambor de Hojalata», una perturbadora novela del premio Nobel de literatura: Günter Grass; en ella un niño al cumplir los tres años decide no crecer más, pero su mente se desarrolla y evoluciona, es la mentalidad de un adulto en el cuerpo de un niño. Su opuesto, el espejo de este personaje de ficción es Peter Pan, un adulto que conserva la mentalidad de un niño. Ambos personajes expresan una psicología desajustada, pero en este artículo vamos a hablar del último personaje.