Científicos van a despertar un virus prehistórico de 30.000 años descubierto en el permaforst de Siberia. Es el cuarto virus pre-histórico que se encuentra desde 2003. Antes de reanimarlo se asegurarán de que no pueda causar ningún daño ni a animales ni a humanos. Para que aun virus se le considere gigante ha de medir más de medio micrón, en este caso mide 0,6 micrones. La comunidad científica avisa de que el cambio climático está consiguiendo que el permafrost ya no sea tan "permanente" y esto puede dar lugar a la reaparición de patógenos.
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