Los alrededores de la catedral de Santiago de Compostela carecen de servicios públicos, a pesar de las aglomeraciones de peregrinos y turistas que se registran en este año Xacobeo. Las cafeterías y baños de la zona cumplen esa función, ante las eventuales urgencias urinarias. Pueden cobrar hasta 0,50 euros por ir al baño, pero de momento ninguno aplica la tarifa. Sólo colocan carteles indicando: "El baño es sólo para los clientes".
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