Es cierto que la alternativa, dejar caer a estas cajas, a Bankia, a Catalunya Banc y a un largo etcétera más de entidades en apuros, probablemente hubiera sido peor, porque los millones de ciudadanos que teníamos depositados nuestros ahorros en estas antiguas cajas, lo hubieramos perdido todo o casi todo. Pero también es cierto que estos queridos políticos nuestros nos debían haber dicho la verdad desde un principio. Estas multimillonarias ayudas a la banca han sido, en su inmensa mayoría, a fondo perdido. El Estado no las va a recuperar nunca.
|
etiquetas: banca , rescate , ayudas , política