Nos ha parecido especialmente insultante para la memoria de las víctimas de la tragedia el que se hayan empleado etiquetas como “Pray for Orlando” [...] Desde las mezquitas, iglesias y todo tipo de templos se acusa a personas como esas que murieron de ser aberraciones contrarias a la naturaleza, de que ofenden a Dios, ese Dios al que masas de maricones dirigieron en Twitter sus plegarias con el
#PrayForOrlando.