Sobre la superficie lunar se encontraban dos astronautas. Estaban a unos cuantos metros de la nave de aterrizaje, donde el resto del equipo bajaba todo el material necesario para larga lista de experimentos planeados. El capitán James Mayansky increpó a su acompañante: -¿Qué, te convences ahora? ¿Es esto suficiente prueba? Has estado callado todo el viaje desde que despegamos de la Tierra, podrías decir algo. El segundo astronauta guardó silencio. Detrás del cristal del casco de su casco espacial su rostro estaba serio y ceñudo.
|
etiquetas: humor , ficcion , magufo , conspiranoia , luna