Granjeros en Islandia de la región afectada por la erupción del volcán están luchando por evitar que sus animales ingieran o inhalen las cenizas, que podrían ocasionar sangrado interno, lesiones en los huesos y pérdida de dientes. Cerca de Skogar, al sur del volcán, la ceniza baja desde la montaña bloqueando el Sol y cubriendo el pasto, los animales y los seres humanos, dejando un escenario cubierto de polvo gris. Vía :
www.tri-cityherald.com/2010/04/18/981129/icelands-farmers-try-to-save-