Al presentarse el domingo en la ceremonia de conmemoración de los atentados del 11-S tras haberle sido diagnosticada una neumonía, la candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, hacía lo mismo que millones en su país cada día: ignorar sus síntomas y tratar de sobrellevar un día de trabajo. "A nadie se le permite estar enfermo. La enfermedad es vista como una debilidad", dice Leanne DeRigne, profesora de trabajo social en la Universidad Florida Atlantic. Yañade: "En el núcleo mismo de la identidad de los estadounidenses está la idea de
|
etiquetas: prese3ntismo , eeuu , modelo sanitario