Jesús Samper fue el dueño absoluto del proyecto urbanístico y comercial Nueva Condomina desde antes de que se hubiera firmado un solo papel. Incluso antes de que el propietario del Real Murcia y el alcalde de Murcia suscribieran en 1999 aquel protocolo privado «anómalo, inexplicable y extrañamente no publicitado», según el fiscal anticorrupción, por el que el primer edil se comprometía a recalificar al empresario una gran superficie de terreno para que pudiera construir un nuevo estadio de fútbol y situar al Real Murcia entre la élite.
|
etiquetas: murcia , pp , caso umbra , corrupción , urbanismo , samper , cámara , condomina