Me consta que en este foro hay unos cuantos escritores, y unos cuantos abogados, así que me quiero dirigir a ellos en un artículo. Yo también, comos sabéis, soy escritor de ficción, y en este caso me parece importante señalarlo.
A menudo en este foro se me llama desalmado por no creerme las versiones de las víctimas y por echar pestes de este sistema judicial nuestro en el que la declaración de la víctima es suficiente para acusar a alguien. No de verdad, no soy un cabrón insensible que quiere que se eche tierra encima abusos sucedidos hace veinte años en un convento, o a un asqueroso magreo indeseado en un portal, o a un insulto o una agresión en una discusión de pareja. Pero quiero, exijo, que sólo se condene con pruebas y no baste la declaración de la víctima.
Me dicen también que para eso están los jueces, para determinar la veracidad de la declaración, para ver si hay incoherencias, para ver si todo encaja y es verosímil.
Y ahí es donde me echo las manos a la cabeza, me acojono, y me dirijo a los dos o tres escritores que conozco en este foro, y les pregunto: pero coño, ¿no nos dedicamos nosotros a eso? ¿No existe una profesión que consiste en generar relatos coherentes, que encajen y no se contradigan? ¿engo que anunciarme para casos de denuncias, paras construirle un buen relato a alguien y que condenen a su oponente por la cara bonita? ¿Hasta eso hemos llegado?
Joder, de verdad: que somos un os cuanrtos, sólo aquí, los que sabemos constrtuir un relato y hasta hemos cobrado un buen dinero por ello. Que hacer un relato creíble de unos hechos no prueba nada. Que el hecho de que el relato sea coherente no lo aleja de la ficción, sino todo lo contrario. ¿Cómo se puede esperar que un escritor, que se dedica a eso, se crea los relatos de los demás?
Claro que no me creo una puta mierda de nadie. Por supuesto que no. Sé lo fácil que es inventar las cosas. Sé lo sencillo que es que las cosas encajen. Sé cómo trazar un personaje y un timing para unos hechos, o no podría escribir novela negra. Por aquí hay quien es guionista de cine y series. Y también sabe. Más le vale, coño, o mejor se va dedicando a otra cosa.
¿Y de lo fino que estés creando ese relato o esa ficción puede depender que a alguien le metan cinco o quince años? ¡¡¡Cómo no me voy a inquietar!!!
Me preocupa, y mucho, que el nivel de la presunción de inocencia haya bajado hasta un límite compatible con escribir relatos para un concurso de pueblo. He sido jurado y de varios y se que hay CIENTOS de personas que los escriben bien. Si un relato bien contado, además de como pasatiempo literario, se admite como prueba en un juicio, estamos verdaderamente jodidos.
Sálvese quien pueda.