Este fin de semana me animé a seguir esta receta y el resultado fue mejor de lo esperado. Tiene bastante tiempo de preparación total al hacerse todo desde cero, incluido el caldo de marisco en el que cocinar los garbanzo, pero el resultado es un plato de sensación ligera y lleno de sabor.
Ideal para esos días fríos de primavera, cuando hacer un cocido es demasiado pero todavía no llegó el tiempo del gazpacho y la ensalada