#13 Igual no te estoy entendiendo bien y lo dices solo por lo del ambiente represivo, pero ¿estás diciendo que el que los curas sean gays explica en parte que sean pederastas?
#2 La izquierda, bajo los principios de igualdad y no discriminación, tiene como prioridad defender a los a los colectivos "débiles" y "oprimidos". Los immigrados procedentes de países "pobres" (en lo económico), por el hecho de ser minoria en una sociedad reptora despiertan su sensibilidad, Y más cuando esos países de origen fueron en su tiempo áreas de colonización europea. Ahí se toca otro resorte importante en dicha reacción, que es el punto de "lucha contra el poder establecido" y que suele identificarse con el poder de las clases dominantes occidentales (los poderosos opresores de los países de origen se toman como "lacayos" de "nuestros poderosos").
En teoría, no creo que haya ningún reproche moral hacia ese enfoque y los sentimientos de solidaridad frente al "débil" son, en mi opinión loables.
El problema es cuando todo esto te lleva a perder visión sobre aspectos que forman parte de las relaciones sociales. La solidaridad de la clase obrera funciona básicamente cuando todos los miembros se autoidentifican a sí mismos como "trabajadores" y por lo tanto como "iguales", por encima de otros aspectos agregantes identitarios (religión, nacionalismo, etc.).
En el caso de las sociedades europeas, la clase trabajadora se ha ido alejando de la religión (tanto institucional como también en lo personal y social), por varios motivos. En cambio, en muchos países de origen especialmente los musulmanes, el laicismo no ha llegado a establecerse de manera mayoritaria. Pueden haber críticas hacia ciertas instituciones (o miembros destacados de ellas), pero más allá de ello, se sigue percibiendo "su religión", como algo positivo que nada tiene que ver con el hecho de que sus sociedades no hayan podido avanzar a nivel de lo que entendemos como "progreso".
En fin, me estoy enrollando mucho, y me toca entrar en el curro. A ver si me da por continuar en otro momento.
#2 la izquierda no tiene que felicitar el Ramadán ni la Navidad ni nada que huela a religión. Es una gran torpeza. De mayor tamaño que aquella otra de defender a la mafia taxista frente a otras alternativas. ¿Qué esperaban, pescar votos en ese gremio voxero??
Me preguntó lo mismo que el autor, quién cojones les asesora...
#10 Efectivamente, la gente civilizada, entre los que supongo nos encontramos ambos, tienen un inmenso campo de debate entre cualquier extremo y este otro, el que he caricaturizado (para dummies) en este artículo. Sin embargo, ten en cuenta que, para la masa de los votantes, su ideología se reduce a un par de ideas, que bien pueden ser las de las citas presentadas. Y algunos políticos, como es el caso del argentino de moda, basan todo su discurso en ese mantra. No hablo del neoliberalismo teórico, sino del real, el que acaba transformándose en el discurso radical y simplista de una propuesta ya de por sí bastante extrema: www.meneame.net/story/fanatismo-caso-milei