#7 Pues no. Primero porque tal y como dice la noticia Con los centros de salud saturados y la Atención Primaria en proceso de reactivación tras las limitaciones impuestas por el covid, los ánimos están más que caldeados. Los pacientes se sienten «desatendidos» y los sanitarios dicen estar «saturados». El que se piense que no hay gente violenta sin paciencia en otras etnias, es un ignorante. Y segundo porque normalmente los gitanos van en manada al hospital y aquí sólo se habla del agresor y de su madre.
Estás señalando a un colectivo sin tener ni el menor indicio de que el agresor pertenezca al mismo. Pero viendo tu comentario #17 veo que esa parece ser tu costumbre.
#23 Sí, sabemos que es un hijo de puta de los que el mundo sale ganando cuando desaparecen del mismo. La etnia a la que pertenezca es lo de menos, ¿o es que si un rumano, marroquí o español le suelta nueve puñetazos a un médico es más justificable?
A lo mejor os pensáis que #2 / #26 es gitano también...
#26 Del texto “ Le dijeron que ese centro de salud no era el suyo, que se le iba a atender, pero que la próxima vez debería ir al que le correspondía” Cuando no te encuentras bien en los centros de salud se te debe atender como desplazado estes en Madrid o en Galicia. Siempre tienes que rogar y parece que te hacen un favor, cuando son ellos que cobran de tus impuestos. Te hacen humillarte y denigrarte como persona para darte una atención a la que están obligados.
#15 Pues no sé yo quien sale más perjudicado con todo esto: La cancelación llevó el libro del puesto 600 al puesto 51 en Amazon. La intolerancia queer es nuestra mejor publicista. #12
#2 No tengo ningún interés especial en la noticia, pero la he leído por encima y no aprecio nada de lo que afirmas. No la encuentro tendenciosa en ningún sentido.
Hay que tener poco sentido común para ir a operarse a un país externo a la comunidad europea. Primero admito mi desconocimiento médico, pero me da la sensación de que la obesidad mórbida es. en general, uno de esos problemas propios del primer mundo que nos permite ver la deriva que ha tomado un mundo donde el raciocinio, junto con tiempo libre y las necesidades básicas cubiertas, tiende al desvarío. Es como un paso involutivo.