Hoy veo los vídeos del mitin que celebró ayer la extrema derecha en Vallecas. Veo las cargas contra periodistas y vecinos. La Policía se comportó, igual que otras veces, como la seguridad privada de los ultras. Ahora las miradas se dirigen hacia Marlaska y surgen dos hipótesis. La primera, que el Gobierno más progresista de la Vía Láctea azuza a los agentes contra las clases populares. La segunda, que los policías actúan movidos por sus propias simpatías políticas y que el ministro de Interior es incapaz de controlar a su rebaño.
|
etiquetas: jonathan martínez , policía , grande-marlaska , antidisturbios