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Tras años buscando la forma de mejorar los embarques, las aerolíneas tienen un nuevo reto: acabar con los "gate lice"

Quizás nunca hayas viajado en un vuelo intercontinental, hecho transbordos o —al igual que quien esto escribe— experimentado las comodidades de la clase business, pero a poco que recurras a aerolíneas es probable que te hayas encontrado con lo que los estadounidenses llaman despectivamente "gate lice", los "piojos de puerta". No te confundas. Aunque suena exótico, el concepto tiene poco de glamuroso. Se refiere a los pasajeros que se apelotonan ante la puerta de embarque.

| etiquetas: aerolineas , gate lice
Menuda novedad, hace años que muchas aerolíneas embarcan por grupos y si no perteneces al grupo que están embarcando te mandan para atrás. Por ejemplo Vueling.
Recuerdo un embarque en el que estaba de los primeros, y tenía delante mío dos gallegos. En esto llega un payo trajeado colándose a todos gritando "Soy praioridhi", es decir, que había pagado el plus prioritario y había llegado justo, e iba enloquecido. La cosa es que él era el último de los praioridhi, y nosotros los primeros de clase turista.

La cosa es que, lógicamente, recorrimos todo el embarque y el finger, que era largo, tras de él, y estos dos hijos de puta le iban gritando y descojonandose "Soy praioridhi", "Ojo, que soy praioridhi"... Aún me estoy riendo.
No sé qué glamour o exotismo puede alguien malinterpretar del término "piojos de puerta"...
#1 Exótico no tiene por qué ser bueno. El dengue o la malaria son enfermedades exóticas en Europa

En cualquier caso, si a alguien le parecen molestos los "gate lices", tendrían que haber visto los embarques de Ryanair cuando empezaron a operar en España hace 20 años. Por aquel entonces no había asientos asignados, la gente se sentaba donde quería, y obviamente solía ser un absoluto caos
#5 los piojos, no
Si el problema es el espacio en los portamaletas de cabina, prohíbe esas maletas en cabina y no dejes introducir algo más grande que un bolso de 30*30*10cm o sea una mochila pequeña o bolso pequeño que entre bajo el asiento, y al que se intente colar que no le dejen embarcar y pierda el vuelo, ya verás como tras cuatro o cinco expulsados sin posibilidad de embarcar y que te dejen en tierra no se cuela ni Blas, te devuelven el dinero y a correr, mano de santo
#4 es más fácil no cobrar un riñón por el equipaje, a veces incluso más que el propio billete.
Yo voy más cómodo con equipaje de mano y por eso procuro entrar pronto al avión para no tener que facturar la maleta, más que nada por la pérdida de tiempo en recogerla y evitar la posibilidad que se pierda o que algún otro piojo del aeropuerto te la abra.
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menéame