Aunque desde que se inventó el sostén o sujetador ha basado su uso en lo evidente (sujetar), parece ser que tras un extenso estudio de hasta 15 años de duración se ha descubierto que esta prenda femenina hace más mal que bien. Ni reduce los dolores de espalda ni ayuda a sujetar, más bien al contrario, pues su uso debilita los músculos que sostienen los pechos de forma natural, según el autor del estudio.
|
etiquetas: sujetador , medicina , salud , ciencia , pechos