Hace un rato que he llegado a casa después de ser presidente de una mesa electoral en Barcelona y aún estoy alucinando. A parte de varias irregularidades que no detallaré para no alargarme, pero que demuestran las enormes fallas del sistema, he alucinado con un montón de cosas. Primero: después del recuento, faltaban un par de votos que no aparecían. La responsable de la junta electoral insistía en que "eso es normal, nunca cuadra". Yo le he dicho que tenía que cuadrar, a lo que dice, "es igual.... texto integro en
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