Estoy tan feliz sin móvil. Estoy localizado en mi trabajo, mi fijo funciona perfectamente y, qué quieren que les diga, he vuelto a experimentar la libertad de no estar pendiente del dichoso aparatito del demonio. Les aseguro que hay vida sin móviles, como que hay vida también sin televisión y hasta sin internet, todas esa necesidades innecesarias creadas con la idea de mantenernos enganchados a algo (pero que sea de pago). Pero una cosa es sentirte libre y otra cosa es sentir que te toman el pelo como a un ignorante.
|
etiquetas: telefonía , móviles , ono