La fama se la llevaron Bono de U2 y Pavarotti por su Miss Sarajevo, pero el que se jugó la vida sin hacer tanto ruido fue Bruce Dickinson, el excantante por aquel entonces de Iron Maiden. En pleno cerco de Sarajevo, junto a su grupo Skunkworks atravesó las líneas, en contra del consejo de los militares de la comunidad internacional, para actuar en la capital de Bosnia. Cuarto de siglo después, contó la historia en sus memorias y en un documental. Hace unos días, le nombraron ciudadano honorario de la ciudad
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