Tienen la forma de cubos para la basura con ruedas, de 70 centímetros de alto por 50 de ancho. Al activarse, su núcleo, en forma de hongo, se eleva a casi dos metros para hacer la desinfección. Una luz blanca, de rayos ultravioleta, es disparada de forma intermitente, como si se tratara del flash de una cámara fotográfica, para destruir bacterias y virus en un radio de hasta siete metros. Los equipos, de fabricación estadounidense, aseguran una desinfección “en un rango de 99,9%”.
|
etiquetas: ecuador , desinfección , robot