Hay un señor llamado Arévalo que en su momento de gloria salía por la tele y se vendían sus cassettes en gasolineras (estoy trabajando en un post, no te impacientes, será caviar puro) haciendo chistes de gangosos y mariquitas (tal cual) cuándo no había nada más que ver. Actualmente sus opiniones personales ("los gays no son hombres de verdad") y sus chistes (él es un chiste en sí mismo), me producen más asco que si tuviera que hacer snorkel en el pantano de Mequinensa lleno al 100% de purines.
|
etiquetas: loquillo , arevalo , johnny depp , boicot