"Elija usted, elija. Tenemos agua con sabor a tifus, a cólera, a malaria, a hepatitis, a disentería, a fiebre amarilla..." Los neoyorquinos que caminan por la calle 14 miran de soslayo al insólito 'vendedor' y ponen cara de asco ante las botellas con un líquido de sospechoso color anaranjado. "Por un dólar, saboree el agua sucia que beben a diario en Africa y en Latinoamérica". La idea es recaudar fondos para el Tap Project, en cooperación con Unicef y con la meta de facilitar agua potable durante 40 días a un niño por cada dólar recaudado
|
etiquetas: dirty water , agua sucia , tap project , unicef , solidaridad