Mitigar el cambio climático plantando árboles no es tarea fácil. Es fundamental planificar dónde, qué, cómo y cuándo reforestar, vigilar prácticas de ecoblanqueo de grandes corporaciones y, sobre todo, cuidar los bosques que ya existen. La plantación de árboles en sitios deforestados puede contribuir a compensar las emisiones de dióxido de carbono, pero si se realiza en lugares y con especies poco adecuadas pueden fracasar y terminar aportando a la atmósfera más carbono del que secuestran.
|
etiquetas: árboles , cambio climático