Parece claro que la socialdemocracia devenida en socioliberalismo ha abierto las puertas del desencanto a los ultras. Lo que convendría empezar a pensar es cuál ha sido la responsabilidad en este desencanto de las teorías situadas entre el altermundismo y lo posmoderno que surgieron en los noventa y que han marcado la agenda de la protesta en estos últimos 25 años. Este rotondeo retórico para definirlos viene de una de las pocas cosas que les daban cuerpo común: el interés que ponían en distanciarse de manera tajante del concepto izquierda.
|
etiquetas: activismo , alt-right