Es una invitación incómoda. Una invitación que ningún presidente de EE.UU. ha aceptado, y que al parecer tampoco aceptará Barack Obama en su viaje a Japón. El conciliador Obama tampoco pisará Hiroshima, una de las dos ciudades (la otra fue Nagasaki) bombardeadas con la bomba atómica hace 64 años.Según publica hoy "The Washington Post", los nipones llevan meses hablando de esta posible visita, fantaseando con la idea de que un presidente americano vea con sus propios ojos la tragedia atómica.
|
etiquetas: obama