Nespresso es un sistema totalmente patentado y cerrado. Nestlé licencia la marca Nespresso a fabricantes de cafeteras, pero retiene la propiedad única sobre la fabricación y la elaboración del café. En otras palabras, no puede haber ningún otro fabricante que elabore cápsulas compatibles con el sistema Nespresso. Eso hace que de forma automática los usuarios de Nespresso pasen a encontrarse a merced de Nestlé. Se compara esta situación con la existencia de estándares cerrados en el mundo de los ordenadores. Relacionada en
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