Laura tuvo que abandonar su pueblo, ya que el hombre que la violó y embarazó (y la amenazó con dañarla si lo denunciaba) sigue en libertad dos meses después de presentar la denuncia, e incluso pasea frente a la casa de su madre. Además, una agente del Ministerio Público le dijo que podía ir a la cárcel si abortaba. La Norma Oficial Mexicana permiten el aborto en caso de violación, pero una iniciativa local, aprobada mientras las autoridades tardaban más de un mes en tramitar su denuncia, inhabilitó esta ley.
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