Al menos 400 residentes británicos tienen ingresos anuales superiores a los 10 millones de libras (casi 15 millones de euros), pero sólo 65 pagaron la renta. The Evening Standard calcula que la hacienda británica puede perder cerca de 3.000 millones (cerca de 4.500 millones de euros) al año por los truquitos que se han buscado para no pagar. Está en inglés pero es igual de indignante.
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