Un inmigrante que abusó de una niña de 12 años no fue denunciado a la policía por su relación con la madre. Abdul Dostmohammadi, de 18 años, vivía con su pareja de 45 años cuando abusó de la chica. Cuando ésta le contó lo que había ocurrido, su madre no lo denunció por miedo a que lo deportaran de vuelta a Afganistán, tal y como revelan los documentos del juicio. La mujer, trabajadora de un centro para menores inmigrantes, ofreció a Dostmohammadi vivir en su casa después de que, al cumplir la mayoría de edad, no pudiese permanecer allí.
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