La guerra, pese al estancamiento en algunos sectores del frente, ha entrado en una fase más dinámica en muchos sentidos. El ataque ayer al puente de Crimea, la movilización rusa, la ofensiva ucraniana, el empuje de los milicianos hacia Bakhmut, el redoblamiento de la ayuda occidental a Ucrania o la recepción de drones iraníes por parte rusa, así como la llegada del invierno son factores que afectan al conflicto y su evolución.
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