edición general
8 meneos
91 clics

Su Distinguida Señoría

Nunca había sido un buen estudiante, así que con 16 años dejé de ir al Instituto. Como tampoco me gustaba trabajar –había estado de telefonista y repartidor de pizzas- un amigo me contó que había que hacerse del “partido”. Me dijo que la política consistía en hablar sin decir nada y que encima te pagaban, además de un sueldo, todos los gastos de manutención. Total, que decidí hacerme del “partido”.

| etiquetas: política , corrupción , opinión

menéame