Un nuevo estudio muestra que los usuarios están más dispuestos a compartir información errónea sin leerla cuando les indigna, lo que contribuye a su difusión y explica por qué mitigar las 'fake news' con información veraz no tiene éxito. En otras palabras, estar enfadados y sentir la necesidad de alinearnos moralmente con nuestro grupo nos hace bajar la guardia, y ese es el punto débil que aprovechan los agentes que tratan de difundir noticias falsas. El 75% de las publicaciones en redes se comparten sin que los usuarios hagan clic en el enlace
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