Probablemente, el principal problema estructural del país sea la corrupción. Es un lastre permanente desde tiempos de la Colonia y seguro también fue un problema en el Imperio Incaico, aunque algunos pretendan negar esto último. El daño que la misma le ocasiona a nuestra economía es notable, no sólo por el uso inadecuado de los recursos públicos, sino por la ralentización que ocasiona a nuestro crecimiento económico, que al final es el único medio eficaz para lograr el desarrollo del país y la mejora en las condiciones de vida de los peruanos.
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