Lucía (nombre ficticio ya que ha pedido el anonimato), es estudiante de Estudios Ingleses en la Universidad Complutense de Madrid. Para pagarse la carrera y la mitad del alquiler del piso, en el que vive con su madre, trabajaba en una franquicia de comida de la cadena Rodilla. El 14 de marzo le comunicaron que iban a hacer un ERTE. Un mes después, el 14 de abril, desde la Administración le confirmaron que lo iban a tramitar. Sin embargo, aún no se le ha ingresado ese dinero.
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