China ha diversificado sus esfuerzos y, de hecho, esta misma semana ha puesto en marcha la mayor batería de flujo del mundo, una batería de flujo de vanadio de 100 MW y 400 MWh que ofrece un almacenamiento de energía relativamente barato sin utilizar litio. China planea apoyarse también en el almacenamiento de energía en aire comprimido (para gestionar casi una cuarta parte de todo el almacenamiento de energía del país para 2030). La nueva planta puede almacenar y liberar hasta 400 MWh, con una eficiencia de diseño del sistema del 70,4%.
|
etiquetas: renovables , baterías , almacenamiento de energía , aire comprimido