Franco acumuló tantos títulos durante su carrera que obligó a sus apologistas a forzar la máquina de la lisonja para estar a la altura. En efecto, dado que el dictador fue Generalísimo de los Ejércitos de Tierra, Mar y Aire y Caudillo de España y de la Cruzada, no parecía sencillo superar por la vía retórica tales distinciones oficiales, pero se logró, vaya si se logró. El Caudillo llegó a ser comparado con Alejandro Magno, Julio César, Napoleón, Jenofonte, Cristobal Colón y el superhombre de Nietzsche.
|
etiquetas: franco