Isabel Villalonga explica que rechazó pagar casi dos millones de euros y se guardó un documento con los motivos para que "no le cortaran la cabeza". Isabel Villalonga, funcionaria de la Generalitat Valenciana, ha dado la puntilla al Instituto Nóos por el contrato con el gobierno de Francisco Camps para la celebración de los fallidos Juegos Europeos. El conglomerado que dirigían Iñaki Urdangarin y Diego Torres presentó facturas que superaban los dos millones de euros por sus trabajos pero Villalonga se negó a pagar 1,9 millones de euros.
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