Resulta evidente que nuestro Código Penal presenta desequilibrios en cuanto a las penas que atan de pies y manos a jueces y fiscales. Así pues, en España sale mucho más barato -penalmente- dar una paliza a alguien que robar un pan o una pizza. Le cae menos pena de cárcel a quien agrede sexualmente a un menor que a quien trafica con una cantidad menor de droga. Existe la idea, más o menos extendida, de que las leyes españolas protegen más la propiedad privada que la integridad física.
|
etiquetas: carcel , pan , pizza , leyes , penal