El desplazamiento de los vientos del oeste hacia el sur, que se observa desde hace 40 años en la Tierra, puede disparar las emisiones de CO2 del océano y anular los esfuerzos del hombre por combatir el calentamiento climático. El agua arrastra el Co2 a la superficie. "En los últimos 40 años los vientos se han desplazado al sur tanto como lo hicieron hace 17.000 años", así lo afirman científicos del Observatorio Terrestre Lamont Doherty de la Universidad de Columbia (EEUU). En inglés:
www.sciencedaily.com/releases/2009/03/090312140842.htm