Aunque nuestros valores, principios y visiones divergen, esta guerra brutal no nos deja otra opción que tolerar a Hamás. Cuando los tanques, aviones y buques de guerra de una potencia ocupante invaden Gaza, matando a más de 14.000 civiles, con el pretexto de erradicar a Hamás, sólo hay un enemigo: la ocupación. A partir de ese momento, es imposible separar a Hamás de la población.Asmaa Al-Ghoul es periodista y activista feminista y prodemocrática palestina que vive actualmente en Francia. Es autora de L'Insoumise de Gaza (Calmann-Lévy, 2016).
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