Dos décadas después del annus horribilis que vivió la monarquía británica, los empresarios del ladrillo podrían agarrarse ahora a la misma expresión que utilizó la reina Isabel. Si 2008 y 2009 fueron deprimentes para el sector inmobiliario y en 2010 se vivió una tímida recuperación, este año que ahora termina va a cerrar con los peores indicadores que recuerdan los más veteranos del sector.
|
etiquetas: vivienda , construcción , venta , caída