El resumen para lectores es el siguiente: en diciembre de 2007 el gobierno socialista, con Narbona en el ministerio de Medio Ambiente, anunció al sector eléctrico que les cobraría 1.100 millones de euros por los derechos de emisión de CO2. Ahora el BOE informa que no, que ya no los cobra. "La tendencia que están siguiendo estas tecnologías, podría poner en riesgo, en el corto plazo, la sostenibilidad del sistema, tanto a nivel económico por su impacto en la tarifa eléctrica, como técnico comprometiendo además,la inversión ya realizada".