El gas natural licuado (GNL) deja una huella de gases de efecto invernadero 33% peor que la del carbón, cuando se tienen en cuenta el procesamiento y envío, según un nuevo estudio. “El GNL se fabrica a partir del gas de esquisto; para fabricarlo, hay que sobreenfriarlo hasta que licuarlo y luego transportarlo en grandes buques cisterna. Eso requiere energía”. Las emisiones de metano y CO2 en la extracción, procesamiento, transporte y almacenamiento de GNL son la mitad de su huella total.
- Paper (abierto):
doi.org/10.1002/ese3.1934
Qué pena que no sea un sistema seguro