Estudios recientes apuntan al murciano Andrés de Claramonte como el verdadero autor de algunas comedias del Siglo de Oro, como El Burlador de Sevilla, que hasta ahora se creían de otros dramaturgos, entre ellos Tirso de Molina. Su mala entrada en los estudios literarios ha ido corrigiéndose merced a investigadores como S. Leavitt, A. Rodríguez López-Vázquez, F. Cantalapiedra o A. García Reidy, entre otros, que han estudiado con rigor su obra, y han apreciado sus dotes para la creación dramática.